La escuela que queremos es la que permite que los niños, adolescentes y jóvenes encuentren sentido a su educación, que sea un espacio de producción, expresión, reflexión, defensa de sus derechos, cumplimiento de sus obligaciones y que en ellas logren actuar como verdaderos cristianos y buenos ciudadanos: respetando y haciéndose respetar , aprendiendo a aprender, siendo solidarios, valorando la vida, protegiendo su salud y la de los demás y cuidando responsablemente el medio ambiente.